Si tienes iniciativa y te mueves mejor en cierta anarquía laboral, tu trabajo está en una ‘start up’, una opción que es mejor que desdeñes si prefieres el horario y la jerarquía de una compañía más tradicional. Encuentra la empresa que más te conviene.
-Virtual Teletrabajador En el entorno virtual no existe un puesto, sino unos objetivos a cumplir en remoto. Los dispositivos móviles son tu herramienta de trabajo. Hace tiempo que las multinacionales tecnológicas más avanzadas han optado por el teletrabajo, no apto para los poco disciplinados, porque eres tú quien decide cómo organizar tu jornada laboral para realizar tus obligaciones. En estas empresas, el trato personal suele ser escaso y, aunque puedes contactar con el resto del equipo, debes estar preparado para ser resolutivo sin contar con la ayuda inmediata del resto. El teletrabajo también requiere autoexigencia.
-’Start up’ Creativo Las empresas recién nacidas quieren profesionales que no necesiten un jefe que les diga lo que tienen que hacer, que sean capaces de convertir las dificultades en retos y estén dispuestos a innovar. En las start up, la iniciativa alimenta la actividad de quien apuesta por ser su propio jefe, y eso es lo que exige el emprendedor a sus colaboradores. Tanto el jefe como los empleados, se mueven por los proyectos más que por las retribuciones económicas. Estas organizaciones se caracterizan por su mentalidad abierta, por su proactividad, y por su autonomía y responsabilidad. Si estos atributos te definen, ésta es tu compañía.
-Familiar Comprometido Un protocolo familiar arraigado en las tradiciones define a las compañías forjadas por varias generaciones. Conseguir que su empresa se convierta en el mejor legado para sus herederos es el objetivo de estos empresarios, para los que su negocio es su vida. El compromiso y la unidad caracterizan a estas firmas en las que sólo encajarás si asumes que el ascenso a puestos de responsabilidad tiene el techo de cristal que marca la familia, al igual que tu iniciativa y creatividad. La vida personal y la profesional se confunden en estas organizaciones que adolecen de cierto paternalismo y son muy exigentes con sus empleados: el crecimiento es una prioridad, pero también lo es el compromiso de todos sus trabajadores. Encajar en una empresa depende de cómo afrontas su cultura corporativa y ello determina si te sientes realizado o incómodo en tu puesto
-Multinacional Inquieto Algunas de estas empresas fueron familiares en sus orígenes, de ahí su afán de permanencia. Pero su crecimiento y la entrada de nuevos socios en su accionariado las ha convertido en corporaciones a la medida de mentes inquietas. Trabajar en grandes equipos, integrados por distintos departamentos en cualquier parte del mundo, marca su día a día. Estarás preparado para ello si no te asusta el ritmo vertiginoso de trabajo y te gusta viajar, porque su actividad se desarrolla en diferentes países. Suelen ser organizaciones muy jerarquizadas y que promueven la promoción de sus empleados. Recuerda que son entornos muy competitivos, en los que la lucha de egos es una constante.
-Microempresa Multidisciplinar Una plantilla que no excede de diez trabajadores obliga al profesional a desarrollar diversas funciones en la microempresa, el modelo más propicio para explotar tu versatilidad, ya que requiere perfiles multidisciplinares. Su reducido tamaño te permitirá disfrutar de los beneficios de una estructura flexible, lo que favorece la toma de decisiones y su capacidad de adaptación a los cambios en el mercado. Este modelo te quedará pequeño si tienes ambiciones profesionales: la microempresa tiene que competir con los grandes grupos, y sus objetivos a corto plazo y oportunidades de expansión son más limitados.
-Pública Conformista Tu deseo de un trabajo para toda la vida se cumple si optas por ser funcionario. Disfrutar de un horario fijo para realizar unas tareas concretas es una de las ventajas que observan estos trabajadores, que acostumbran a ser bastante conformistas. No obstante, si te atraen estas circunstancias laborales, debes valorar tu vocación de atención al ciudadano y tener en cuenta que tu espíritu innovador no encajará bien en el ámbito público: las funciones suelen estar muy limitadas lo que deja poco margen a la creatividad. Por otra parte, el desarrollo de carrera es muy rígido y, tiene un techo a partir del cual se exige cierta vinculación política.
-ONG Altruista El carácter abierto, la adaptación a las circunstancias y la vocación de ayuda son imprescindibles si quieres trabajar en una organización sin ánimo de lucro. Su actividad se orienta hacia unos valores concretos que debes compartir para sentirte cómodo. También tendrás que viajar, porque las más grandes participan en programas internacionales. Encajarás en este tipo de empresas si consideras la satisfacción personal y el bien común por encima de una buena remuneración.